martes, 25 de enero de 2011

MARATON DONOSTIA 2010



Son las 7:45 de un 28 de noviembre del 2010 y vamos en el coche camino de Donosti a correr la 33º Maratón Donostia. Atrás quedan casi 4 meses de preparación. Un montón de estiramientos. Cientos de kilómetros en las piernas. Kilometros por Donosti, kilómetros por Navarra y hasta kilómetros por Irlanda. Atrás quedan días de calor en los que hemos sudado como pollos. Días de frio. Días de sufrimiento y dudas, cuando no carburábamos como queríamos. Días de agua, de llover sin parar y aun así hemos salido a correr. Días malos, pero también muchos días buenos. Y nosotros siempre nos quedamos con lo positivo de cada uno. Y hoy es el día. El GRAN DIA.

Por el camino vamos hablando de diferentes cosas aunque todas relacionadas. Como de costumbre, Lute no ha descansado todo lo que le hubiese gustado. La valeriana y las infusiones de tila no le han quitado los nervios. El medio litro de agua y las tostadas con miel no han faltado en nuestro desayuno nada más levantarnos a las 6:40. La climatología no es la que deseábamos, tan solo 2 graditos y además tiene pinta de que puede llover.

Llegamos a Donosti y metemos el coche al parking. Ya se ven korrikalaris cambiándose y calentando para el gran acontecimiento. Se va acercando la hora de la verdad y hay algunos nervios. Y es que después de varios meses entrenando hoy es la gran cita y no se puede fallar. Nos cambiamos, bebemos un poco y salimos a calentar. Durante el calentamiento no faltan los consejos de Lute a Norman, y es que Lute va a correr su tercera maratón, mientras que Norman se estrena en la distancia. Volvemos al coche, nos despojamos de la ropa que nos sobra, terminamos de estirar y nos vamos hacia la salida. En la salida el ambiente es extraordinario, mucha gente, música alta, spiker. Lo único que falta es que subiera un poco más la temperatura pues sigue marcando 2 grados y además a chispeado un poquito. Al menos no hay apenas viento. Cada vez están más cerca las 9:00 y los nervios son mayores. Vamos al baño a mear. A los dos minutos volvemos otra vez. A los 3 minutos de nuevo. ¡Estos nervisss!!. Esperemos soltarlo todo ahora y no tener que parar por el camino. Nos colocamos en la salida y apuntamos alto, vamos junto al cartel de las 3 horas. Comienza la cuenta atrás por megafonía 10,9,8,7,6...mientras, los corredores con el subidón de adrenalina nos animamos mutuamente. 5,4,3,2,1 y llegó la hora de la verdad. Empezamos la carrera.

Salimos muy concentrados, siendo conscientes de que va ser muy largo. Los primeros kilómetros son para calentar y coger el buen ritmo. Empezar demasiado rápido puede pasarnos factura y no queremos eso, por lo que vamos regulando. Hacia el km 3 nos separamos. Lute se mete en un grupo que va a muy buen ritmo siempre por debajo de las 3 horas. Norman tiene dudas y prefiere quedarse con el grupo de la liebre. En el km 5 el ritmo ya es el bueno y ahora toca lo difícil, mantenerlo. Las sensaciones son buenísimas y las pulsaciones van perfectas. Sobre el km 10 toca la primera dosis de membrillos para el cuerpo. Un par de membrillos y algo de agua vienen de perla. Continuamos con el mismo ritmo, van pasando los kilómetros, la temperatura apenas sube y además ya nos ha caído un chaparrón. Hacia el Km 20 nueva dosis de membrillos y liquido. Llegamos al punto en el que comienza la verdadera carrera, la media maratón, y los tiempos que llevamos son magníficos.

Lute 1:28:35; Norman 1:29:48. Va todo perfecto. Los kilómetros no perdonan y los grupos se empiezan a romper. Pasamos de nuevo por Anoeta, estamos en la última vuelta. Antes de llegar al Km 30 comemos los últimos membrillos y volvemos a hidratarnos una vez más. Sobre el Km 31 cae una tormenta que no gusta a nadie, lluvia, granizo y viento en contra. Nos quedamos un poco fríos, esperemos que no nos afecte. Chute de energía tras pasar las universidades, y es que tres Xirimiris, más concretamente Juanma, Iñigo y Txus, están ahí animándonos. Está lloviendo y hace mucho frío y a pesar de ello han venido, esto es de agradecer, gracias cuadrilla. Entramos en el polígono por última vez, se hace un poco pesado, giramos en la rotonda y vuelta para atrás. Ya estamos en el Km 35 y seguimos manteniendo el ritmo. Las piernas se hacen notar pero los ánimos de la gente y sobre todo de los conocidos nos hacen sacar lo que nos queda. Llegamos al Km 40, poco más de dos nos separan de la meta. Iñigo y Txus vuelven a estar ahí animándonos. Van con las bicis por al lado gritándonos consiguiendo que nos exprimamos aún un poco más si es que podemos. Lo estamos dando todo. Km 41, toda la cuadrilla de Korrikalaris de los domingos está ahí apoyándonos, esto es la ostia. ¡¡Ya estamos, ya estamos, ya estamos!!, entramos en el estadio Anoeta, Km 42, tan solo 195 metros nos separan de la meta. Miramos el reloj y sabemos que lo vamos a conseguir. Vemos que todos estos meses corriendo después de trabajar, comiendo lo que marca la dieta, y sacrificando todas las parrandas van a dar sus frutos. Vamos a entrar por debajo de las tres horas. Un sueño para casi todos los korrikalaris populares. Última recta, últimos metros, ya está ya está. Lo hemos hecho, lo hemos logrado, lo hemos conseguido, hemos bajado.

LUTE: 2:57:44

NORMAN: 2:58:29

Al llegar a meta nos damos un abrazo y nos felicitamos mutuamente. Solo el que ha corrido una maratón sabe lo que hemos sentido en este momento. Las piernas lo notan y tenemos algunos calambres, y es que el frio y los kilómetros han hecho mella en nosotros. Poco a poco vamos andando hacia las gradas. Allí están Patxi (Chofer y Personal Trainer), Ainara (Maiti-Maiti), y toda la cuadrilla de Korrikalaris. Cogemos la medalla y subimos. Nos cuesta subir las escaleras por los calambres. Manta térmica, plátanos, manzanas, frutos secos, agua y Powerade; toca recuperar. Nos cambiamos de ropa para no enfriarnos. Estiramos un poco. Lo justo. Y es que estamos reventados. Nos duele casi todo, pero estamos felices. Ahora toca irse a casita y darse una buena ducha, bien calentita.

De camino al coche vamos hablando. Este reto lo hemos conseguido y ahora toca plantearse una nueva aventura. Nuestro objetivo es el Maratón de Nueva York en 2012, para ello, deberemos correr una media maratón en 1:23:00. Esta será nuestra próxima meta. Y tiene pinta de tener ya fecha.

Nos vemos en Donosti el 15 de mayo


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